jueves, marzo 12, 2009

Yo no quiero un amor civilizado

Si tuviera tiempo pondría esta canción de Joaquín Sabina a sonar en el blog. Porque después de los sucesos de los últimos meses en mi vida he vuelto a ser como Cristina (de Vicky, Cristina, Barcelona): soy esa que aunque no esté tan segura de lo que quiere, tiene muy claro lo que no quiere. Y no quiero alguien que tire la piedra y esconda la mano, -necesito a mi lado a alguien que tenga mas pantalones que yo en la vida para aprender de su valor y su empuje-. No quiero hacer concesiones sobre cosas fundamentales por alguien para luego tener a quien culpar por lo que no fui y tampoco quiero alguien a quien tenga que ocultarle quien soy o pedacitos de mi vida; ni que me quiera domesticar y/o domesticarse a mi lado. No quiero amores tibios o por pasar el rato, necesito que me quieran con ganas, y ser capaz querer igual. Difícil de conseguir, no?

Contigo (Joaquin Sabina)

Yo no quiero un amor civilizado,
con recibos y escena del sofá;
yo no quiero que viajes al pasado
y vuelvas del mercado
con ganas de llorar.

Yo no quiero vecínas con pucheros;
yo no quiero sembrar ni compartir;
yo no quiero catorce de febrero
ni cumpleaños feliz.

Yo no quiero cargar con tus maletas;
yo no quiero que elijas mi champú;
yo no quiero mudarme de planeta,
cortarme la coleta,
brindar a tu salud.

Yo no quiero domingos por la tarde;
yo no quiero columpio en el jardin;
lo que yo quiero, corazón cobarde,
es que mueras por mí.

Y morirme contigo si te matas
y matarme contigo si te mueres
porque el amor cuando no muere mata
porque amores que matan nunca mueren.

Yo no quiero juntar para mañana,
no me pidas llegar a fin de mes;
yo no quiero comerme una manzana
dos veces por semana
sin ganas de comer.

Yo no quiero calor de invernadero;
yo no quiero besar tu cicatriz;
yo no quiero París con aguacero
ni Venecia sin tí.

No me esperes a las doce en el juzgado;
no me digas "volvamos a empezar";
yo no quiero ni libre ni ocupado,
ni carne ni pecado,
ni orgullo ni piedad.

Yo no quiero saber por qué lo hiciste;
yo no quiero contigo ni sin ti;
lo que yo quiero, muchacha de ojos tristes,
es que mueras por mí.

Y morirme contigo si te matas
y matarme contigo si te mueres
porque el amor cuando no muere mata
porque amores que matan nunca mueren.