Ser lesbiana, homosexual, bisexual, transgenerista -o simplemente diferente- en Colombia es enfrentarse a la frustración y la impotencia de tener gobernantes que no solo nos discriminan, sino se burlan de nosotr@s de una manera triste, absurda y muy dolorosa.
Hoy tengo el corazón roto, hemos sido pisotead@s una vez mas.
Después de una lucha muy dura, sorprendentemente la cámara de Representantes en plenaria aprobó el proyecto de ley que se suponía nos iba a brindar un mínimo de derechos a las personas con orientación sexual diversa. L@s activistas y la comunidad nos alegramos y celebramos, ya que solo faltaba la conciliación del texto de la ley, además de la sanción presidencial, con la que Uribe ya se había comprometido.
Pero oh sorpresa, en una patraña sin precedentes, el partido de la U (Coalición uribista, por supuesto), y nuestr@s amig@s cristian@s se encargaron de hacer historia ya que por primera vez en el país han tumbado una ley durante la conciliación del texto.
Estamos en temporada preelectoral y yo pregunto: VAMOS A SEGUIR ELIGIENDO A L@S MISM@S?
Pero oh sorpresa, en una patraña sin precedentes, el partido de la U (Coalición uribista, por supuesto), y nuestr@s amig@s cristian@s se encargaron de hacer historia ya que por primera vez en el país han tumbado una ley durante la conciliación del texto.
Estamos en temporada preelectoral y yo pregunto: VAMOS A SEGUIR ELIGIENDO A L@S MISM@S?
Haciendo: Preparando un material para la marcha
Escuchando: I will survive - Gloria Gaynor
La noticia de la semana: la misma de este post
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